MEDITACIONES

de     F. F.

Juan 12: Una escena de adoración, servicio, y comunión


Léase por favor Juan 12:1-10


Antes de continuar con el capítulo 12, deseo hacer mención de algo más sobre lo que expresa el Espíritu Santo a través del evangelista Juan, relacionado con la profecía (sin querer) de Caifás. Esto no lo dijo por sí mismo, sino que como era el sumo sacerdote aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la nación; y no solamente por la nación, sino también para congregar en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos.

¿Quiénes eran los hijos de Dios que estaban dispersos, por los cuales Jesús iba a morir? ¿Cómo iban a ser congregados en uno? Solo nos da de conocer a unos cuantos en los evangelios, pues eran personas de fe y eran gentiles. Vemos la mujer cananea de Mateo 15:21-28 a quien Jesús dijo No soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel. Sin embargo, la mujer insistía en su petición con las palabras aun los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos. Jesús le decía Oh mujer, grande es tu fe. También había el centurión de Lucas 7:1-10 quien tomó con humildad el lugar de un pecador diciendo no soy digno pero reconociendo toda la autoridad y poder en la persona del Señor Jesús. Jesús les dijo Os digo que ni aun en Israel he hallado tanta fe. Hay también la mujer samaritana y los hombres de su pueblo, que hemos visto en Juan 4. Y creyeron muchos más por la palabra de él, y decían a la mujer: Ya no creemos solamente por tu dicho, porque nosotros mismos hemos oído, y sabemos que verdaderamente éste es el Salvador del mundo, el Cristo. Estos samaritanos quienes habían creído en Jesús, reconocían su persona como el Cristo, el Mesías. ¿Qué aprovechaba a ellos que Jesús fuera Mesías de Israel siendo ellos samaritanos y no judíos? Pues, no era solo el Cristo, sino también Salvador del mundo, algo aun no revelado en su plenitud hasta el libro de los Hechos. Así el Espíritu de Dios por Juan revela como la muerte de Jesús iba a ser con el fin de congregar en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos. Se habla de la iglesia, que iba a ser constituido de ambos judíos y gentiles, congregados en un solo rebaño, guiados por la voz del Buen Pastor de las ovejas.

Continuando con nuestro capítulo 12, vemos una escena que podemos decir anticipa la época cristiana en que nosotros nos encontramos. Era el tiempo de Seis días antes de la pascua. Es la tercera vez que hemos visto la pascua en nuestro evangelio, la primera siendo en el capítulo 2, verso 23 y el segundo en Juan 6:4 Siempre en el evangelio de Juan vemos que la pascua era la fiesta de los judíos. Su Mesías rechazado, el verdadero cordero de Dios anunciado en el primer capítulo por Juan Bautista, ya está de solo seis días de su crucifixión. Era una semana llena de importancia por el mundo entero. Y le hicieron allí una cena; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban sentados a la mesa con él. Entonces María tomó una libra de perfume de nardo puro, de mucho precio, y ungió los pies de Jesús, y los enjugó con sus cabellos; y la casa se llenó del olor del perfume. Marta, en tiempos pasados, había quejado de la falta de ayuda de su hermana. Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude. Lucas 10:40 Pero aquí, vemos a Marta, contenta y agradecida, sirviendo con animo a su Señor que había levantado de los muertos a su hermano Lázaro. Y el mismo Lázaro, sentado a la mesa con el Rey de Israel como cual Mefi-boset (2 Samuel 9), disfrutando de comunión con el Señor Jesús. Pero María se nota destacado de nuevo por su fe y entendimiento de la bendita persona que está a la mesa.

En el orden judaico, no había lugar por las mujeres en el sacerdocio. Era sitio reservado por los hijos varones de Aaron. Pero he aquí en la época cristiana leemos por Pedro vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo. 1 Pedro 2:5 Déjame, por favor, poner la traducción de Darby como es en el inglés, pues en el español suena como su fuera un mandato sed edificados. No lo es, sino es algo que Dios ha hecho y está haciendo en nosotros en la época cristiana. Vosotros también, como piedras vivas, están siendo edificados casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo. Así María aquí nos enseña como la adoración consiste en dar al Señor Jesús el lugar de preeminencia y honor. Ella no dijo ni una sola palabra, pero ¿quién puede decir que su culto no era uno de lo más elevado?

Es claro que el Señor Jesús recibe su adoración y esto en vista de las críticas, incitados por Judas, pero según los otros evangelios, continuadas por los demás discípulos. Entonces Jesús dijo: Déjala; para el día de mi sepultura ha guardado esto. Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros, mas a mí no siempre me tendréis. ¡Que importante es recordar que solo aquí en la tierra tenemos la oportunidad de adorar a un Cristo rechazado!

Pero los principales sacerdotes acordaron dar muerte también a Lázaro, porque a causa de él muchos de los judíos se apartaban y creían en Jesús. ¡Pobre ser humano, decido en su propio juicio! En vez de confesar la realidad de las pruebas de su divinidad de Jesus, buscan como matar a la persona resucitada de los muertos.

Felipe Fournier
20 agosto de 2023