Abrahán se casa con Cetura
(25:5) Y Abraham dió todo cuanto tenía á Isaac. (25:6) Y á los hijos de sus concubinas dió Abraham dones, y enviólos de junto Isaac su hijo, mientras él vivía, hacia el oriente, á la tierra oriental.
Ultimos dias de Abrahán
(25:11) Y sucedió, después de muerto Abraham, que Dios bendijo á Isaac su hijo: y habitó Isaac junto al pozo del Viviente que me ve”. (Génesis 25:1-11)
Adjunto a este correo algunas fotos del local que están construyendo en Ensenada México, poco a poco cuando tienen recursos. Tomé las fotos ayer pues después de repartir calendarios en el pueblo de Tecate con M. L. y C. D., fuimos a Ensenada a saludar los hermanos y traerles una donación para ayudarles con el proyecto de construcción. Algunos me han preguntado acerca de Ruth, la jovencita hija de Enrique y Ruth de Ensenada que ha estado internada por casi dos meses. La dieron de alta la semana pasada, y ahora está en casa recuperando bajo terapia.
Vimos la semana pasada como Isaac se casó con Rebeca y la amaba, la segunda mención del amor en la Biblia. Es bonito ver que Isaac no tuvo otra esposa, mientras Abraham y Jacob tenían concubinas. No debemos pensar que Dios aprobaba a estas relaciones de esposas múltiples.
“Y Abraham dió todo cuanto tenía á Isaac”. Hebreos 1 nos da el anti-tipo en la persona del Señor Jesús. “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo”. Recordamos como Satanás en el desierto prometía al hijo los reinos de la tierra. “Y le llevó el diablo á un alto monte, y le mostró en un momento de tiempo todos los reinos de la tierra. Y le dijo el diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque á mí es entregada, y á quien quiero la doy: Pues si tú adorares delante de mí, serán todos tuyos”. Lucas 4:5-7 Pero no, el Señor Jesús no iba a recibir los reinos de la tierra de la mano de Satanás, pues ahora es el día de su paciencia. “Y el Señor encamine vuestros corazones al amor de Dios, y a la paciencia de Cristo”. 2 Tesalonicenses 3:5 Está esperando el día cuando serán suyos por derecho y por redención.
En este capítulo vemos como Isaac y su medio hermano Ismael fueron reunidos después de muchos años viviendo aparte para sepultar a su padre Abraham. A veces así es; hay cosas en la vida que nos separan. Puede ser que somos separados de hermanos amados a través de divisiones entre los hermanos. Pero cuando hay un entierro, volvemos a estar juntos para el sepelio. Es seguro que Ismael amaba a su padre Abraham, aunque tuvo que salir de la casa cuando solo tenía 13 años, para nunca más regresar. En estas ocasiones recordamos que viene el día cuando nunca vamos a ser separados de nuevo. “Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, … ”. 2 Tesalonicenses 2:1. Me acuerdo una vez después de una división entre los hermanos congregados al nombre del Señor hace más que 20 años, me sentí muy deprimido, habiendo sido separado de muchos hermanos muy queridos. Un hermano se levantó en una conferencia justo después y nos leyó aquel versículo. Mi di cuenta que en aquel día, no va a faltar ninguno. ¡Todos seremos reunidos con el!
Terminamos esta semana con el versículo 11. “Y sucedió, después de muerto Abraham, que Dios bendijo a Isaac su hijo; y habitó Isaac junto al pozo del Viviente-que-me-ve”. El pozo nos habla del agua de la palabra. Su nombre nos hace ver que Isaac vivía en la presencia de Jehová, el Viviente que me ve. Ojala que sea así en nuestras vidas; que la palabra de Dios sea el fundamento de nuestras vidas y que vivamos en la presencia del Señor Jesucristo.
23 febrero de 2014